Derecho a la ciudad
Iniciamos este nuevo milenio con la mitad de la población mundial viviendo en ciudades. Y las tendencias dicen que la población urbana en los países del sur se duplicará (de 2 mil a 4 mil millones de personas) en los próximos 30 años. Hoy como hace siglos, las ciudades son, potencialmente, territorios con gran riqueza y diversidad económica, ambiental, política y cultural. Sin embargo, los modelos de desarrollo implementados en la mayoría de los países, tanto en el norte como en el sur, se caracterizan por establecer patrones de concentración de renta y poder que generan pobreza y exclusión, contribuyen a la depredación del ambiente y aceleran los procesos migratorios y de urbanización, la segregación social y espacial y la privatización de los bienes comunes y del espacio público. Contribuyen a ello las políticas públicas que, al desconocer los aportes de los procesos de poblamiento popular a la construcción de ciudad y ciudadanía, violentan la vida urbana.
Este contexto favoreció el surgimiento de luchas urbanas que vienen generando la necesidad del reconocimiento, en el sistema internacional de los derechos humanos, del Derecho a la Ciudad. Por ello a inicios del milenio HIC en general, e HIC-AL en participar, junto con numerosos aliados empezaron a trabajar de forma explícita en la conceptualización de este derecho planteando la necesidad de elaborar una Carta Mundial por el Derecho a la Ciudad que terminó de elaborase en 2005. En este documento el derecho a la ciudad es definido como el usufructo equitativo de las ciudades dentro de los principios de sustentabilidad y justicia social. La Carta, más que la suma de derechos individuales y colectivos ya reconocidos en tratados internacionales, contempla el Derecho a la Ciudad como la expresión fundamental de los intereses colectivos, sociales y económicos, en especial de los grupos vulnerables y desfavorecidos, respetando las diferentes culturas urbanas y el equilibrio entre lo urbano-rural.
Más aún, este derecho presupone la interdependencia entre población, recursos, medio ambiente, relaciones económicas y calidad de vida para las presentes y futuras generaciones. Implica cambios estructurales profundos en los patrones de producción y consumo y en las formas de apropiación del territorio y de los recursos naturales. Se refiere a la búsqueda de soluciones contra los efectos negativos de la globalización, la privatización, la escasez de los recursos naturales, el aumento de la pobreza mundial, la fragilidad ambiental y sus consecuencias para la supervivencia de la humanidad y del planeta.
Principios fundamentales
En paralelo, pero también vinculado a este proceso, las mujeres, reunidas en el Foro Mundial de las Mujeres (Barcelona 2004), elaboraron una primera propuesta de esta Carta por el Derecho de las Mujeres a la Ciudad.
En 2007 en México el Movimiento Urbano Popular impulsó la elaboración de una Carta de la Ciudad de México por el Derecho a la Ciudad. Un año más tarde se conformó el Grupo Promotor de la Carta de la Ciudad de México en el que, entre otr@s actores, participaron HIC-AL y el Gobierno de la Ciudad. Finalmente la Carta local, que si bien toma como ejemplo la Carta Mundial plantea también avances, fue firmada en 2010 por los tres poderes de la Ciudad, así como 250 organizaciones de todo tipo.
En 2008 organizaciones miembros de HIC incidieron para que en la nueva Constitución de Ecuador quedara reconocido el derecho a la ciudad, el cual fue reconocido en el artículo 31 de la Constitución:
“las personas tienen derecho al disfrute pleno de la ciudad y de sus espacios públicos, bajo los principios de sustentabilidad, justicia social, respeto a las diferentes culturas urbanas y equilibrio entre lo urbano y lo rural, El ejercicio del derecho a la ciudad se basa en la gestión democrática de ésta, en la función social y ambiental de la propiedad y de la ciudad, y en el ejercicio de la ciudadanía.”
En 2014 a iniciativa de un grupo de organizaciones y redes que se reunieron en Sao Paulo (Brasil) se conformó la Plataforma Global por el Derecho a la Ciudad en la cual HIC participa de manera muy activa. La Plataforma logró incidir en la Agenda Urbana Mundial que surgió de la III Conferencia sobre la Vivienda y el Desarrollo Sostenible de la ONU (Hábitat III) que se organizó en Quito (Ecuador) en 2016 logrando el reconocimiento del derecho a la ciudad en el artículo 11, 12 y 13 de este documento internacional.
En 2016, a raíz de la reforma política del Distrito Federal, se dio pie a la elaboración de la primera Constitución Política de la Ciudad de México. Enrique Ortiz, quien ha sido Secretario General y Presidente de HIC y en la actualidad participa en HIC-AL fue invitado a formar parte del grupo de expertos escogidos por el entonces jefe de Gobierno de la Ciudad de México para elaborar el borrador de la primera Constitución Política de la Ciudad de México que fue enviado a la Asamblea Constituyente de la Ciudad de México. La Constitución fue publicada en febrero de 2017 y entró en vigor en septiembre de 2018. Gracias a este encargo, y retomando los avances que sobre este derecho se habían dado en el marco de la elaboración colectiva de la Carta de la Ciudad de México por el Derecho a la Ciudad, se logró la inclusión del derecho a la ciudad en dicha Constitución, para quedar como sigue el artículo 12:
Artículo 12- Derecho a la Ciudad
- La Ciudad de México garantiza el derecho a la ciudad que consiste en el uso y el usufructo pleno y equitativo de la ciudad, fundado en principios de justicia social, democracia, participación, igualdad, sustentabilidad, de respeto a la diversidad cultural, a la naturaleza y al medio ambiente.
- El derecho a la ciudad es un derecho colectivo que garantiza el ejercicio pleno de los derechos humanos, la función social de la ciudad, su gestión democrática y asegura la justicia territorial, la inclusión social y la distribución equitativa El jefe de Gobierno de aquel entonces conformó un grupo de expertos encargados de elaborar el borrador de este documento a enviarse a la Asamblea Constituyente. Enrique Ortiz, ex Secretario y Presidente de HIC y actualmente miembro de HIC-AL, fue invitado a participar en este esfuerzo
En la actualidad se está trabajando en la incidencia de la legislación secundaria derivada de la Constitución como es el caso de la iniciativa de Ley Constitucional de Derechos Humanos y sus garantías de la Ciudad de México que reconoce este derecho en el título III.