Enrique Ortiz
Como referente de los debates a desarrollar en las mesas de trabajo propuestas para el V Encuentro Regional del Grupo de Trabajo de PyGSH se recogen en estas fichas, citas tomadas de las Voces del Hábitat, convocadas por HIC-AL y el Centro de Estudios y Acción por la Igualdad, para recoger las reflexiones y aportes de diferentes actores sobre:
¿Cómo llegamos a esta pandemia?
¿Qué estamos haciendo para enfrentarla?
¿Qué necesitamos para sobrepasarla y construir un mundo diferente?
Se obtuvieron 58 respuestas provenientes de 21 países. Como primer ejercicio y por limitaciones de tiempo se seleccionaron un tanto al azar una tercera parte de las grabaciones y se cubrieron dos terceras partes de los países incluyendo representantes de organizaciones de base, ONG, académicos, profesionales y funcionarios y exfuncionarios públicos y de organizaciones y fundaciones internacionales.
Constituye una primera selección de frases críticas, sobre las causas e impactos de la crisis global que hoy se vive y de la impotencia de los gobiernos para enfrentarla; sobre la coincidencia que se percibe en los entrevistados en torno a la necesidad de cambios estructurales profundos y de su negativa a volver a la “normalidad”.
Llama mucho la atención al escuchar las 58 voces el nivel de coincidencia que se percibe en ellas. En especial sobre la importancia de fortalecer las organizaciones sociales y la articulación de los diversos actores comprometidos en la preservación de la vida. También, y más relevante aún, el llamado a poner en práctica procesos transformadores tanto personales como colectivos y culturales que pongan al frente la convivialidad, la solidaridad, la ayuda mutua, la compasión, la cooperación y luchen contra la mercantilización de los bienes comunes y por la preservación de nuestras libertades.
También, y esto es lo que más se destaca, de la importancia de organizarnos en forma incluyente valorando y respetando nuestras diferencias, levantando nuestro nivel de conciencia sobre la importancia de ir juntos en la preservación de la vida, la superación de las desigualdades y la construcción de un mundo viable y disfrutable para todos.
Esto nos invita a cuestionar los juegos de poder, los protagonismos y nuestro miedo al diferente para tejer juntos redes y procesos capaces de impulsar la transformación profunda de un sistema que en su colapso puede anular toda esperanza.
¿Qué tanto podemos contribuir desde nuestro campo de acción para que esto no suceda? Esta es la pregunta que debe guiar nuestros debates, decisiones y realizaciones. Pese a que hoy lo único cierto es la incertidumbre, apostemos con convicción, fuerza y perseverancia por lo que hoy se nos presenta como imposible.
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¡EL FUTURO ES HOY!