Exigimos a las autoridades competentes a adoptar las siguientes medidas con enfoque de derechos humanos y perspectiva de género, al menos hasta que se restablezcan las condiciones de empleo e ingresos de los hogares, previas a la declaración de emergencia sanitaria.
Desde que inició la Jornada Nacional de Sana Distancia en México, más de 100 organizaciones de la sociedad civil, académicos/as y activistas nacionales nos pronunciamos para exigir a los tres órdenes de gobierno de los Estados Unidos Mexicanos que adopten una serie de medidas para garantizar el derecho a una vivienda adecuada y al agua ante la contingencia generada por el COVID –19.
Es necesario que se atiendan urgentemente las necesidades de quienes han visto reducido su salario o no están recibiendo remuneración alguna durante este periodo, las que viven en espacios inadecuados, en hospedajes o viviendas comunes, hacinadas, en asentamientos en condiciones precarias o no reconocidos, carentes de servicios públicos básicos o en personas de población callejera.
- Acordar medidas para suspender o reducir los pagos de alquiler. Es necesario que existan previsiones legales que permitan parcializar, reducir o suspender y prorrogar sin ninguna penalización, pagos de rentas de inmuebles usados para viviendas o micro y pequeños negocios familiares a solicitud de la persona que compruebe su situación de necesidad. En el caso de las rentas, muchos contratos no están registrados, aún así esta situación no debe ir en detrimento de los arrendatarios. El Estado deberá facilitar el acuerdo entre las partes e incluso, establecer un organismo de mediación entre ellas. El propietario de una vivienda, que pueda demostrar que depende del alquiler para satisfacer sus necesidades básicas y que no ha cobrado el mismo por las razones antes señaladas, deberá recibir un apoyo por parte del Estado para que la medida sea equilibrada y no perjudique a ninguna de las partes.
- Regular el precio de los alquileres. Algunas plataformas que se dedican a la renta de inmuebles habitacionales han declarado recientemente que en las últimas semanas los precios de las rentas se han incrementado. Es necesario que las autoridades lo impidan considerando la pérdida de puestos de trabajo, las reducciones salariales además de la crisis económica que la pandemia está generando y seguirá generando en los meses por venir.
- Suspender de inmediato todos los desalojos -tanto los judiciales como los extra judiciales- por el riesgo sanitario que implica quedarse sin un lugar para resguardarse. Las autoridades deben dar a conocer la línea o medio directo por el cual la población puede reportar y denunciar cualquier desalojo que se haga en contra de esta previsión, para impedirlo.
- Legislar en materia de alquileres para garantizar adecuadamente los derechos de arrendadores y arrendatarios. Es urgente que se legisle para garantizar estabilidad en la relación contractual, un límite en el aumento de los precios de los alquileres y para evitar abusos de ambas partes.
- Garantizar vivienda alternativa y refugios temporales para las personas que los necesiten. Estos espacios deberán estar en condiciones dignas, salubres, con acceso al agua potable y con todos los cuidados necesarios para que no se vuelvan centros de contagio. Para ello, las autoridades podrán emplear viviendas vacías, subutilizadas, abandonadas o terrenos baldíos que se adecuen como vivienda de emergencia o refugio, con base en el principio de la función social de la propiedad.
- Garantizar agua, saneamiento y alimentos y otros apoyos a las personas que carecen de ellos. En el país miles de personas carecen de acceso al agua, o lo tienen de manera muy limitada, así como carecen de acceso al saneamiento; por lo que resulta vital que se les garanticen pipas de agua, eventualmente gratuitas, así como baños públicos adecuados. También hay que evitar el corte de estos servicios. Asimismo, es indispensable garantizar que todas las personas necesitadas puedan recibir canastas de alimentos.
Es urgente que se pongan a las personas en el centro, en lugar de los negocios y que construyamos una #LeyInquilinaria de vanguardia para la Ciudad de México.